La formación a distancia, una opción con resultados de éxito

La formación a distancia, una opción con resultados de éxito

La formación a distancia de FUNIBER, una opción con resultados de éxito

 

José Luiz Neves, estudiante del Máster en Ciencia y Tecnología Marina de FUNIBER, nos cuenta cómo descubrió fósiles en Angola gracias a la dedicación continua a los estudios y a la experiencia profesional.

Puede parecer suerte, pero según el estudiante, los hallazgos son el resultado de su inquietud continua por la formación  y de la práctica profesional. “Los conocimientos adquiridos en el curso de máster de FUNIBER fueron de suma importancia para mis descubrimientos, pues las investigaciones y los estudios agregaron conocimientos que me ayudaron a descubrir la historia del planeta y la historia del hombre en este contexto. Desde el punto de vista personal, no existe algo más gratificante que trasladar a la práctica lo que uno aprende en la universidad. Muchos maestros me auxiliaron en esta práctica, uno de ellos fue el Prof. Erik Simões”, dice.

Un brasileño que descubrió fósiles con 5 millones de años de historia

José Luiz Neves, nació en Vila Velha, Espirito Santo, en Brasil. Hace 30 años que trabaja en la Petrobras, compañía petrolera brasileña, y cuenta con una amplia formación en Seguridad del Trabajo, Gestión Ambiental y Ciencia de la Tierra.

Entre 2009 y 2013, José Luiz trabajó en Angola. El brasileño estudiaba e iba al campo en los momentos de descanso para comprobar unos datos iniciales de su tesis de maestría, en Miradouro da Lua, que según José, “es un lugar magnífico, una radiografía de los tiempos geológicos”.

A mediados de enero del 2010, paseando en la playa de Cabo Ledo, a unos 120 km de Luanda, con sus hijos José Victor y José Marcos, hizo su primer hallazgo de fósiles marinos. Se trataba de un fósil de amonite, pariente lejano del pulpo, que habitó los océanos durante 300 millones de años hasta desaparecer, al mismo tiempo que los dinosaurios, hace 65 millones de años.

Desde entonces, empezó una exitosa investigación de campo descubriendo, durante los dos años siguientes, afloramientos con diferentes fósiles entre invertebrados y vertebrados. “En otra localidad, hemos descubierto dientes de varias especies de tiburón, entre ellos los extintos Squalicorax y Cretoxyrhinamantelli. En todos los viajes me intereso por conocer la edad de las rocas locales, además de acercarme a la población local, así voy con la visión de turista y a la vez de científico”, cuenta José Luiz.

Pero su hallazgo más importante llegaría dos años después, en una zona urbana de Angola, cuando al pasar por una excavación de construcción civil, encontró fósiles marinos, a 3 metros de profundidad, pero a 6 km del mar. En esta zona, la edad de los fósiles se encuentra en un período de 5 millones de años hasta unos 11 mil años atrás. “Investigando allí, he descubierto fósiles de bivalvos, conchas marinas, cuando aquella área estaba cubierta por el mar. En los suelos superficiales, mamíferos primates, y fragmentos de cráneos y vértebras sacrolumbares de hombres prehistóricos”, dice.

José Luiz encontró más de 60 piezas, entre pequeñas esculturas, herramientas, utensilios y puntas de lanza hechos de fragmentos de conchas. Enviados al laboratorio americano “Beta Analytic”, se observó que algunos utensilios tenían más de 55 mil años, y otros 35 mil años. “Aquella civilización de cazadores-recolectores vivió en la zona durante un período superior a 100 mil años, cuando tuvieron lugar grandes transformaciones en el clima de la tierra, y la consolidación de la raza humana”, concluye José Luiz.

Algunas pinceladas más de la trayectoria de José Luiz 

José Luiz trabajó para algunos proyectos de los gobiernos federal, estatal y municipal, en las secretarías de Medio Ambiente y Energía Renovable. Además, amplió conocimientos en paleontología, con cursos secuenciales en Estratigrafía, Taxonomía y Biosedimentación.

“Mi vida académica está muy ligada a mi biografía, profesional y personal. Donde fuera necesario estudiar más para el perfeccionamiento de mi trabajo, estaba yo, estudiando. El Máster de Ciencia y Tecnología Marina, de FUNIBER, fue una gran oportunidad, pues no tenía tiempo de hacer un máster de forma convencional. Fue importante para lograr alinear conocimientos profesionales, y aportar un mejor servicio también a mi empresa. Ahora estoy en la recta final desarrollando la tesis, que tuve que modificar a causa de los hallazgos”, comenta.

Este año, José Luiz vuelve a estudiar. “Retomo el grado en Biología, que inicié en el 2005, en la Universidad Estadual Norte Fluminense – Rio de Janeiro (UENF), pues tuve que interrumpirlo cuando me trasladaron a Angola, así que espero mejorar mis conocimientos y profundizar más en las investigaciones”.

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